El dolor es un sistema de alarma que avisa que hay un daño y permite protegernos de él. Cuando el dolor se prolonga más de tres meses pasa a denominarse dolor crónico, transformándose en una patología que afecta a la calidad de vida del paciente tanto física como mental.
Se conoce, que alrededor del 20% de los pacientes con dolor crónico es de origen neuropático, que es cuando afecta al nervio. Se caracteriza por aparecer en muchas enfermedades, implicar distintos mecanismos fisiopatológicos, algunos de ellos desconocidos y no tener una línea de tratamiento clara. La medicación anti neuropática clásica incluye desde anticonvulsivantes, antiinflamatorios y antidepresivos hasta la terapia con opioides cuando aparece dolor intenso. Sin embargo, a pesar de toda la amplia terapia farmacológica, no se consigue reducir el dolor y conlleva un alto riesgo de padecer efectos adversos importantes.
Este hecho, desencadena la necesidad de buscar nuevas terapias que estén basadas en la neuro inflamación pero con menos efectos adversos que las ya existentes. Unas de las moléculas más estudiadas y con posibilidades de actuación es la Palmitoiletanolamida (PEA), que es una sustancia que libera nuestro organismo para recuperarse de un daño tisular. A parte de actuar como analgésico y antiinflamatorio, se están estudiando otras propiedades entre las que destacan:
- Efecto antibacteriano y antiviral
- Potencia la inmunomodulación
- Efecto neuroprotector, ya que protege el recubrimiento de las vainas de mielina, pudiéndose utilizar en enfermedades degenerativas como Alzhéimer o Párkinson
- Favorece la recuperación muscular
- Mejora la calidad del sueño
Por tanto, con el uso de ésta molécula, se podría utilizar en combinación con la primera línea de tratamiento, para así reducir la dosis de analgésico, disminuyendo por tanto los efectos secundarios. Este dato es importante sobre todo en los pacientes polimedicados, para evitar interacciones y reacciones no deseadas.
Os mostramos algunos de los complementos alimenticios que contienen la PEA, que además se encuentra reforzado con vitaminas del grupo B, en concreto:
- B1 que contribuye al normal funcionamiento del sistema nervioso
- B6 que contribuye al normal funcionamiento del sistema inmunitario
- B12 que contribuye a disminuir el cansancio y la fatiga
Este prometedor complemento terapéutico natural se puede recomendar en cualquier tipo de dolor en los que intervenga inflamación y afecte a los nervios, como por ejemplo ciática, cervicalgia, dolor mandibular, artritis, artrosis, fibromialgia, esclerosis múltiple, túnel metacarpiano… como coadyuvante a su tratamiento farmacológico. Del mismo modo, que también se podría ofrecer a personas con sobrecarga muscular o que realizan ejercicio físico intenso.
INNOPEA, junto con una buena nutrición (hay nutrientes que activan procesos inflamatorios y otros que lo inhiben) y unos hábitos de vida saludables, permite controlar el dolor y evitar su cronificación. Además como presenta buena seguridad y tolerabilidad, lo sitúan como un potente arsenal terapéutico frente al dolor crónico. Si que es cierto, que aunque los estudios realizados hasta el momento indican que se pueden administrar en cualquier paciente (excepto en embarazo, lactancia y menores de 18 años por falta de estudios), es recomendable consultar con el profesional sanitario para saber si es un tratamiento adecuado para tu situación.